Por causa mayor, esta semana la actividad escolar se ha realizado vía online. Incluso los más pequeños de infantil, y gracias a la ayuda de sus padres, se han conectado a la plataforma para videoconferencias Zoom para reencontrarse con los compañeros de clases y sus profes… Algunos de ellos empezaron las sesiones con un poco de vergüenza de ponerse ante la cámara, pero poco a poco fueron dejando los brazos de los padres y saliendo de su zona de confort para atreverse con la nueva aventura. Con los días han ido ganando espontaneidad e incluso uno de ellos ha improvisado un juego de magia que ha hecho reír al resto. E incluso, en el caso de los Plateros de P4, han cantando una canción en inglés a la vez, lo que ha generado mucha ternura y sonrisas en las casas.
A los alumnos de 1º de primaria les ha emocionado poder conectarse y encontrarse a los compañeros en la misma situación que ellos. Se han recomendado libros y han creado un punto de libro con las mismas indicaciones. También han compartido los horarios con rutinas diarias que tienen para los próximos días y los “checks” conseguidos en la lista de esta primera semana. Además, con Andrea han podido resolver dudas de lo mucho que están aprendiendo en este primer año de primaria y han verbalizado las emociones que les genera echarse de menos, para poder aceptarlas y sentirse reconfortados.
En 2º han aprovechado el Zoom sobre todo para comentar las dudas sobre el trabajo a realizar, colgado por Montse en el Classroom, como el significado de palabras del vocabulario de lectura. Además, muchos han aprovechado para mostrar sus mascotas por cámara y reír un rato… El grupo de 3º, además de resolver dudas con Gemma, han realizado un juego conjunto, por lo que se han relajado y, a la vez, consolidado también aprendizajes de este curso.
En 4º, y una vez superadas las ganas de hablar todos a la vez del primer día y entendida ya la dinámica del Zoom, establecieron unos acuerdos esenciales para que el funcionamiento fuera más fluido, como pedir turno para hablar, respetar el tiempo de intervención del otro, saber esperar… Por ejemplo han estado comentando la comprensión lectora que tenían de deberes y analizando con Marta la reacción de los personajes y lo que podían aprender de ellos para sobrellevar la actual situación.
Los alumnos de 5º han realizado tareas voluntarias que les han propuesto las profesoras de las diferentes materias. A las 9 de la mañana, éstas les lanzaban una nueva propuesta a realizar a lo largo del día, con su apoyo virtual. Las sesiones de Zoom ha sido lo que más les ha gustado porque tenían muchas ganas de hablar entre ellos y reconectar. Lo mismo les pasa a los de 6ª, donde han aprovechado una sesión para compartir los sentimientos que están viviendo. En una hoja han escrito la emoción que sentían en el momento de la conexión (alegre, confusa, tranquila, desconcertado, feliz, confusión, contenta…) y mostrarla frente a la cámara ha sido una experiencia muy sentida para todos, que se han sentido más que nunca parte del grupo.
Los profesores de ESO también están compartiendo sesiones muy productivas del Zoom, donde por ejemplo en Sociales de 1º han podido trabajar más a fondo las zonas climáticas. A lo largo de la semana las sesiones han ido adquiriendo unas dinámicas cada vez más interesantes, gracias en parte a las intervenciones de todos y de poder trabajar las dudas en grupo. También esforzándose en razonar con evidencia, es decir con Cultura de Pensamiento, cada vez que tenían el micrófono abierto.
Todas estas conexiones no sólo resultan útiles para los alumnos sino que profesores también están viviendo como gratificante la experiencia de volver a tener contacto con los alumnos, en las actuales circunstancias. Además, por sentirse útiles para ayudar a calmar inquietudes, relativizar angustias y aportar confianza. A cambio, los alumnos les están demostrando como nunca el valor de la amabilidad que trabajamos este curso e incluso el jueves felicitaron a los profes por el Día del Padre.
Los profesores también están muy contentos por los trabajos que están entregando los alumnos dentro de las franjas horarias preestablecidas, a pesar de que ello les suponga un gran volumen de mails para responder y corregir. Tan optimistas como siempre, valoran también la experiencia de aprender a enseñar de otra forma y de promover en los alumnos la responsabilidad, la constancia y el compromiso.
Saben que estar alienados con una rutina de trabajo y en actividad diaria es bueno para que los alumnos conserven cierta normalidad. Así que también se están esforzando para que las tareas diarias sean variadas y las programan a conciencia para que les resulten lo más atractivas posibles. Un ejemplo es Inglés, donde van variando entre Grammar, Writing, Reading Comprehension, Listening, PET o FCE exams practice y Speaking, de manera que trabajarán todas las “skills”.
También les estimulan para que lo entreguen en diferentes formatos: foto, documento Word adjunto y compartiendo pantalla, que es lo que más les ha costado pero ahora ya han aprendido a hacerlo. Además, de todas las tareas que reciben de los alumnos, éstos les responden con un feedback personal, oportunidades de mejora y un mensaje motivador.
La Cultura de Pensamiento continúa presente en estas nuevas dinámicas, ya que los mapas conceptuales como el web o el flow, les ayudan a ordenar ideas y conceptos, pero ahora también información y dudas. Además, como es un trabajo que realizan de forma colectiva, los alumnos se ayudan entre ellos y a veces incluso consiguen llegar a olvidarse por un momento de la distancia física. Y como nos ha enseñado también la Cultura de Pensamiento, las sesiones siempre terminan con un aplauso general porque, ahora más que nunca, celebramos el aprendizaje. Porque todos nos echamos de menos… y echamos de menos la escuela.