Santa María del Pino es uno de los colegios privados con más tradición y, al mismo tiempo, con más futuro del Maresme. Al mismo tiempo, presenta otra dualidad: la de ser una pequeña escuela en un gran espacio, ya que siempre hemos priorizado tener una sola línea para atender a cada alumno como se merece, con motivación y acompañamiento constantes, sin olvidar el contacto permanente con la naturaleza.

El colegio está situado cerca del centro de Alella, pero alejado del tráfico y del ruido, en una especie de valle silencioso entre montañas, bosques y viñedos al que llega la virazón. En este entorno verde, que recuerda la ubicación de algunas reconocidas escuelas del norte de Europa y Estados Unidos, los alumnos crecen y aprenden de forma sana, consciente y feliz.

La escuela se despliega en tres edificios, uno por etapa (infantil, primaria y ESO), rodeados de patios ajardinados, pistas polideportivas, un parque infantil con toboganes y casitas de juegos, huertos y una antigua viña que nos enraíza al territorio de Alella y su identidad geográfica. Además, tenemos la montaña y los bosques de los alrededores, que a menudo convertimos en aulas y laboratorios donde explorar nuevos conocimientos.

La trayectoria de Santa María del Pino habla por nosotros, de los buenos resultados académicos logrados año tras año y de la educación en valores que tanto nos caracteriza. Nuestro profesorado transmite todo ello con gran profesionalidad y humanidad. Un equipo cohesionado, sólido y en formación continuada para seguir aprendiendo nuevas metodologías y recursos basados en las últimas investigaciones de la neurociencia, además de introducir las mejores tecnologías en el aula.